UN BUEN JUGADOR, JUGADORA DE BALONCESTO

Los que si se convierten en buenos jugadores, lo consiguen por medio de trabajo duro, una disciplina y unas cualidades físicas naturales.

Además de los entrenamientos  con tu equipo, puedes trabajar continuamente y practicar tus habilidades con el balón, maneja el regate hasta que esos movimientos de cambio de mano los sientas naturales para ti. No dejes de practicar el tiro.

Un buen jugador ha de conocer las reglas del juego, sabiendo esto, puedes ayudar a tu equipo. Conoce bien las reglas sobre todo las referentes al  contacto físico y las faltas.

Puedes aprovechar tus capacidades físicas para atacar o jugar en ciertas posiciones que te hagan ganar  un mejor logro del juego, identifícate con tu posición en el campo. No todos los jugadores tienen las mismas habilidades y pueden atacar o defender bien. Estudia el juego y sus posibilidades, es un juego de habilidad física pero se pueden ganar o perder a veces mentalmente. Adáptate a tu entrenador, a su voz, su forma de expresarse, sus instrucciones. Un cabio rápido bien entendido, nos puede suponer la victoria en un encuentro.

Fundamental es que tu estado físico sea excelente, esto mejorará tu velocidad y rapidez de salida. Un buen estado físico, puede hacer que superes a otros jugadores con mas talento que no estén en buena forma, y conforme más avanza el partido, más puedes aventajarlos. Te ayudará si trabajas tu fuerza muscular, puedes imponer en el campo y tener más movilidad en el juego. Una atención especial merece en trabajo de tus pies, lo que heces en el campo con los pies es tan importante como el que realizas con las manos.  El pivote, el equilibrio y el utilizar  la distribución de tu peso, te ayuda para saltar o correr.

Debes saber jugar en equipo, cuando pasar en vez de entrar o tirar, cuando asistir y cuando ayudar o entender cuanto va a llegar  tu ayuda. También has de aceptar las críticas constructivas y los consejos de los demás componentes del equipo.

QUERIDOS JUGADORES Y JUGADORAS:

S i juegas en escolar, en liga local o regional, todos compartimos la misma pasión. Puede que seas el mejor jugador de tu equipo o que estés empezando, lo que es cierto, es que es muy divertido jugar.

Aunque el baloncesto es un deporte de equipo, tu eres responsable de ti mismo y progresar como jugador y compañero de los demás componentes del equipo. Tendrás experiencias de ser ganador y perdedor, y debes tratar que no tenga esto mucho efecto emocional.  Es agradable la felicidad de la victoria, pero no alardees de ello. Y si es derrota, no culpes a los demás ni te quejes de su actuación.

 

Debes recordar siempre si puedes algunas cosas:

1-      El baloncesto es un juego de velocidad, no vayas andando,  corre.

2-      Cada canasta, pase, o acierto del compañero, merece tu felicitación o palabra de aliento. Choca la mano con él.

3-      No te dirijas quejándote a los árbitros, cada vez que lo haces pierdes segundos en la defensa. Espera al final del encuentro si no lo has entendido para que te lo expliquen.

4-      No hagas esfuerzos para lucirte, juega de la mejor manera posible. Si eres bueno, la gente se dará cuenta.

5-      Reconoce los méritos del contrario y trátalos con educación.  Ellos harán lo mismo contigo.

6-      Aprende las reglas del juego. Llega siempre con el tiempo adecuado, aún si eres de los mejores del equipo.

7-      No inventes excusas o culpes a un compañero sobre tu pérdida. Aprende de lo ocurrido.

8-      Siempre debes ser el primero en llegar y el último en cansarte.

9-      Incluso con un marcador con veinte puntos arriba, se pierden algunos partidos, no bajes la guardia hasta que suene la bocina.

10-  No riñas el fallo del compañero, apóyalo.

11-  Prepárate para sentarte en el banquillo para que otros jugadores puedan jugar, incluso si piensas que eres un buen jugador.

12-  Juega con justicia y juega limpio.

13-  Anima siempre a tus compañeros aunque tu equipo pierda de muchos puntos.

14-  Ten humildad con la victoria, no alardes, el triunfo no es tuyo, es del equipo.

15-  Escucha a tus entrenadores y sigue sus consejos sobre cómo jugar. Normalmente el entrenador sabe más, ha vivido más.