Emma Del Pino Negrín Souza fue la primera jugadora
internacional de baloncesto de Gran Canaria.
Sus 1,85 m cuando contaba solo con
14 años, en los años sesenta, hicieron que su profesor de gimnasia la pusiese a
jugar a baloncesto, que fue condición indispensable para poder aprobar la
educación física de entonces. Se dio a conocer por un partido no oficial contra
el equipo de Domingo Díaz.
Al histórico entrenador canario le
hablaron de una niña muy grande que quería agarrar todos los balones que tiraba
por la cancha, hasta que fue a su casa para ficharla. Era enorme la gran
diferencia de altura con el resto de niñas.
Comenzó a jugar un poco obligada por
los consejos familiares. Y cinco meses después, era convocada en su primera
concentración nacional por Domingo Díaz. Muy pronto fue convocada por la antes
selección nacional de categoría joven. Fue considerada como “el techo de
España” siendo juvenil. Fue en edad de junior cuando debuta en Primera División,
máxima categoría de aquella época. Los dos años siguientes no puede jugar en
esta máxima categoría por problemas burocráticos por su edad. Juega entonces en
el junta de Obras del Puerto en Tenerife, sube al primer equipo por méritos
propios, gracias a su manejo de balón, calidad, altura y movimiento interior.
El Junta de Obras del Puerto se
fusiona con en Coronas y allí juega Emma cinco años más antes de hacerlo en el
Tintoretto, con el fue subcampeona de liga. Cerró su etapa deportiva en el
Segovia en donde tuvo un seria lesión y no llegó a volver a jugar a su anterior
nivel.
Con su número 7 en la camiseta, fue la
primera jugadora internacional por Las Palmas.
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