La Selección
Española vence el sábado en semifinales a Turquía por 66-56.
Las españolas de
Mondelo hacen historia metiéndose en la final venciendo en semifinales al
equipo anfitrión. Pasan a jugar la primera final de su historia en un Mundial.
Diez mil espectadores no pararon de alentar a su selección fusionados con
sus jugadoras en el Fenerbaçe Arena de Estambul, pero tuvieron que aceptar el
gran triunfo de España. Las turcas, tras treinta minutos de igualdad y gran juego,
cedieron en el último cuarto.
El equipo
anfitrión con sus defensas alternativas siendo individual si no anotaban y zona
2-3 si conseguían encestar, se lo pusieron difícil a las españolas sobre todo
en la primera mitad, teniendo que jugar al máximo hasta el final del encuentro.
España esperó su momento y a siete minutos del final llegó el parcial clave. Un
13-2 en tres minutos rompió a Turquía, con Alba Torrens espléndida con 14
puntos en el último cuarto. Un 60-46 a falta de cuatro minutos para el final ya
fue inalcanzable para el equipo turco.
El partido empezó
con un parcial de 0 a 5 de las turcas, pero las españolas contestaron entonces con
un parcial de 9 a 0. Desde este momento, las diferencias se movieron alrededor de los
dos puntos con alternancia para los dos equipos. El ambiente estaba tenso y el
público turco volcado con su selección.
Las dos pívots españolas se cargaban con dos faltas antes del descanso, lo que
propició que Lucas Mondelo decidiera jugar con Marta Xargay en la posición de
cuatro. Se llega al final de este cuarto con 28 a 27 a favor de España.
El equipo
español estuvo muy bien en defensa e impartió gran intensidad. Partido muy
largo consiguiendo aguantar, sobre todo en la mitad del tercer cuarto, con la antideportiva
a Laia Palau que permite la máxima ventaja turca, da paso a una reacción de la
selección española, fundamentada en la salida a pista de Nuria Martínez. España se pone en zona para acabar el tercer
cuarto dos puntos por encima en el marcador, 41-39.
En este partido no nos privaron del ya clásico “alley
hoop” en esta competición sus protagonistas, Alba Torrens y Sancho Lyttle. En
el partido del sábado sobresalieron dos jugadoras en ataque, Sancho Little 18
puntos y 12 rebotes y Alba Torrens con 28 puntos, 6 rebotes, 3 asistencias, 7 faltas
recibidas, tomando el mando de muchos ataques. Laura Nicholls hizo un excelente trabajo defensivo sobre la
interior Lara Sanders. La
murciana Laura Gil volvió
a formar parte en la rotación interior española.
España termina
su participación en el Mundial de Turquía con la mejor clasificación de la
historia tras colgarse la medalla de plata en un partido para el recuerdo en el
que compitió ante el que posiblemente sea el mejor equipo de baloncesto
femenino de todos los tiempos.
Probablemente
Estados Unidos, por físico, táctica,
ambición y calidad pueda ser el mejor equipo de baloncesto femenino en la
actualidad.
El equipo español ha conseguido quedar por delante de las selecciones
como Australia, Turquía, Francia o Brasil en este mundial de Turquia.
El partido der ayer contra Estados Unidos comenzó con un gran acierto por parte de las
americanas. Con un casi absoluto dominio del rebote, una calidad excepcional en
tiros exteriores, y una defensa agresiva dejaban claro ya en el primer cuarto
con una gran diferencia las campeonas de
Europa como terminaría este encuentro.
España hizo
alarde de su mejor defensa para detener los ataques de las americanas, con gran
trabajo colectivo para minimizar errores no forzados, tratando de impedir los
contraataques de las rivales y el cierre de rebote. El cansancio de todo el
campeonato se notó, y la calidad de las adversarias fue definitiva. Desde el comienzo,
Estados Unidos con una Maya Moore
espectacular y todo el equipo a un alto nivel en ataque, fue muy difícil para
España no ceder una ventaja que las americanas sabrían administrar durante todo el partido.
Los primeros 11 puntos de la alero americana marcarían el desarrollo del partido.
El equipo
español, salió muy nervioso a la cancha cometiendo sobre todo al principio
errores que permitieron a las americanas correr cotraataques y hacer
anotaciones fáciles. Luego ya centradas las nuestras en la pista consiguieron
anotar y cambiar el derrotero del partido. Pudiendo mover la defensa de Estados
Unidos, conseguían obtener posiciones de
tiro y poder anotar. Ya en el 5 contra 5, al evitar contraataques y salvar el
balance defensivo las rivales no tuvieron el mismo ritmo de anotación.
Tuvimos dos
jugadoras en el quinteto ideal, Sancho y Alba.
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